¿Que es y cómo funciona ?

La aerotermia es una tecnología que permite realizar un intercambio de energía con el aire, y aprovechar esta energía para calentar o enfriar agua, cubriendo las necesidades de calefacción, refrigeración y agua caliente sanitaria de tu vivienda.

Por tanto, la aerotermia usa energías renovables para posibilitar la climatización de tu vivienda y para que puedas disponer de agua caliente. Es una tecnología que se está imponiendo al resto en los últimos años, siendo uno de los sistemas más recomendables del sector.

La aerotermia consta de una unidad exterior, que es la bomba de calor aerotérmica, que absorbe y recupera la energía del aire transfiriéndola al circuito, al tiempo que evapora el gas refrigerante que contiene en su interior. Este gas lo vuelve a comprimir para convertirlo en líquido nuevamente y en el proceso recupera el calor del aire que es aprovechado para el calentamiento del agua para calefacción, agua caliente sanitaria o en caso de enfriarlo, para la refrigeración de la vivienda.

¿Por tanto, a rasgos generales, el funcionamiento de una aerotermia se puede resumir en CUATRO PASOS básicos:

  1. Evaporador. Entra el aire del exterior y se produce un cambio de energía entre el líquido refrigerante del sistema y el aire del entorno, a través de un serpentín. El líquido al estar a una temperatura más baja, al contacto con el aire se evapora.
  2. El líquido refrigerante evaporado llega al compresor, que lo comprime aumentando la temperatura en el proceso, y volviendo al estado líquido.
  3. Es dónde llega el refrigerante después de pasar por el compresor y recuperar el estado líquido. El gas comprimido al condenarse suelta calor, que es el que se aprovecha para el calentamiento de la vivienda.
  4. Válvula de expansión. Baja la temperatura y la presión del refrigerante para iniciar de nuevo el proceso, enviando el líquido refrigerante nuevamente al evaporador.

¿Qué ventajas tiene aerotermia?

  • MÁXIMO AHORRO ENERGÉTICO
  • ENERGÍAS RENOVABLES: Respeta el medio ambiente
  • NO REQUIERE COMBUSTIBLE: No tienes que contratar ningún tipo de suministro de gas, u otros sistemas que requieren un almacenaje.
  • LIMPIO: No requiere limpieza de residuos ni chimeneas para combustión, o cualquier tipo de salida de humos..
  • SILENCIOSO: Tiene niveles sonoros muy por debajo de otros sistemas.
  • MANTENIMIENTO SENCILLO: El mantenimiento es menos exigente que otros sistemas
  • TRES EN UNO: Unifica tus instalaciones en un solo equipo, disponiendo de calefacción, refrigeración y agua caliente.